Toda mi vida ha girado en torno a este sueño. Desde chico siempre soñé con ser alguien reconocido, con esas ganas de ir por la calle y que dijeran mi nombre o me saludaran. Ese es para mi el común denominador de todo… así es como comienza mi sueño. Nací el 29 de agosto del 72, en la casa de mi abuela, por parto natural. En ese momento mi papá estaba trabajando como mozo en la Sociedad Belgrano, porque en esa época se hacían metine. Y mi mama estaba con trabajo de parto, con mi abuela. A la salida del baile le avisan a mi papa que yo había nacido, ya era de madrugada, nací a las cuatro de la mañana. De chico era bastante desinhibido, me gustaba cantar y bailar con mi madre, pero sólo era así entre mis conocidos o mi familia.
En el colegio era tranquilo, siempre fui perfil bajo, nunca me animé a pasar a izar la bandera, ni tampoco a participar de algún acto. Cantaba en el coro del colegio y nunca me animé a hacerlo en público. En los ensayos hacia reír a todos, dejaba a todos fascinados, pero cuando llegaba el momento de presentarme no me animaba.
Al jardín lo hice en el Arturo Capdevila, la primaria en el colegio 285 Capital Federal que quedaba a la vuelta de mi casa. y al secundario en el Bernardo Houssay. Desde chico siempre me gustó cantar y en casa se escuchaba cuarteto. Éramos una familia muy grande y era común que nos juntáramos en la casa de mi abuelo, él es el único que cantaba en mi familia. Siempre la música ha sido nuestra debilidad, estaba presente en todo momento, sobre todo se destacaba la alegría mas allá de los avatares de la vida.
Vivíamos en barrio General Bustos, económicamente no estábamos muy bien pero éramos muy felices. Siempre fui del ambiente de los bailes porque el barrio es muy cuartetero y vivía cerca de los principales clubes de la época, que eran Atenas, Deportivo y la Belgrano. También jugaba al futbol, me probé en Racing pero era muy difícil quedar en esa época, y en séptimo grado consigo probarme en Instituto donde me eligieron para la reserva, me iba muy bien, pero no pude seguir.
A los 18 años tenía la costumbre de cantar sobre las pistas de los grandes de esa época, y a eso lo grababa. Un día uno de los plomos de Sandunga, que vivía cerca de mi casa, me pidió uno de esos cassette, y me pregunto si me interesaría cantar con ellos, yo totalmente convencido le dije que si. A la media hora vino a casa el dueño de Sandunga, pidiéndome que cantara con ellos, porque había escuchado el cassettey le gustaba lo que hacia. En ese momento no sabia que hacer, me volvió el miedo de saber que nunca antes había cantado, pero acepté. Justo ese año había empezado a estudiar Química Industrial, estuve 6 meses. Después me fui a la Tecnológica a estudiar Ingeniería en Sistemas y llegue a cursar materias de segundo año pero nunca rendí un final, no me gustaba, nunca me gusto nada mas que esto.
CRISTIAN CANTANDO EN "SANDUNGA"
En enero del 91 arrancamos tocando con Sandunga, que era la primera separación de Trulala. Tocábamos en Tucumán, viajaba todos los fines de semana, yo hacia la parte moderna y el otro chico hacia la parte tropical. Tuvimos mucha mala suerte, sufrí mucho en esa época porque no me animaba a cantar delante de la gente. Cada vez que teníamos un baile me quedaba parado y no hacia nada. Fue terrible para mi, así que solo estuve un año tocando con ellos. A partir de ahí entré a una agencia de turismo como cadete y el chico que había sido mi compañero en Sandunga formó una banda, él era de Deán Funes y me llamo para tocar con él, pero solo estuve dos meses.
Paso cerca de un año, yo seguía yendo a los bailes en Atenas, Deportivo y la Belgrano, salía siempre con mi primo. Volví a trabajar en la agencia de turismo, y un día Ricardo Reinaldi, que es sonidista y arregla ahora toda la parte técnica de la mayoría de las bandas armó "La Banda Corazón". El me enseñó un montón de cosas, en la banda hacíamos de todo un poco, sobre todo covers de los grandes de esa época. Es ahí cuando empiezo a cantar los temas de Valeria Lynch, que a mi me identificaban y grabo un demo del tema “Solo por maldad” en versión moderno. Estuve cerca de 2 años y grabamos un disco. Pero costaba mucho llegar a Córdoba, era muy difícil en esa época hacerte conocer viniendo de bandas chicas.
CRISTIAN CANTANDO "ENTRE LA NOCHE Y EL DÍA" EN "BANDA CORAZÓN"
En el año 96, un año antes de entrar a Trula, me fui a probar a Chebere, cuando se iba el Toro Quevedo. Yo seguía con mis ilusiones de cantar, soñaba con entrar en alguna banda, sobre todo en Trula, pero se había dado esta posibilidad y no podía desaprovecharla. En Chebere hicieron pruebas durante tres meses y al final del casting quedamos cinco cantantes. Cuando llega la última prueba me enfermé, entonces fui a decirles que no iba a poder cantar y esa fue la primera enseñanza, la de saber que pase lo que pase tenia que cantar. Hice la prueba pero al estar enfermo tenia la voz ronca asi que no quedé seleccionado y fue una depresión muy grande para mi, no quería saber mas nada, sentí que ya había terminado mi lucha, ya tenia 23 años y dije basta.
Comencé a trabajar de nuevo, por tercera vez me toman en la agencia de turismo y sigo yendo a los bailes. Tenia la costumbre de ir temprano, porque me encantaba ver como armaban los plomos, como se iba generando el ambiente, siempre fui de estar muy atento a esas cosas, también observaba mucho a los cantantes de esa época, cómo se movían arriba del escenario, lo que hacían, me fascinaba ver eso.
Empecé a seguir a la Pepa y a Jean Carlos, también iba a los bailes de La Mona, pero mi locura siempre fueron los hijos de Trulala. A Gary nunca pude disfrutarlo, porque tocaba lejos y nunca me anime a ir, además no he sido ese fanático de seguirlo donde estuviera. La única vez que lo vi fue cuando Trula hizo el segundo reencuentro con él, pero yo en ese momento ya era cantante y no pude disfrutarlo como un bailarín.
El contacto para ingresar a Trulala se dio gracias a mi prima, que era amiga de la hija de Victor Scavuzzo, quien en ese momento era el director musical de Trula. Ella le llevó un cassette y una foto mía. Y un día cuando trabajaba en la agencia de turismo recibí el llamado de Manolo, que quería conocerme, así que dejé todo y me fui a la oficina. Estuve hablando con él, me hizo una prueba y me dijo que en dos semanas arrancábamos, esto fue en Enero del 97. Debuté un jueves 31 en Colonia Almada y al día siguiente tocábamos en San Francisco, donde despedían a Sandro y al Turco Jatuff. Apenas ingresé quería cantar modernos, como el estilo de Fernando, pero Manolito me dijo que yo era tropical, así fue que él me inculcó este estilo que me caracteriza desde aquellos años.
PRESENTACIÓN DE CRISTIAN EN TRULALÁ.
Los comienzos en Trulala fueron muy difíciles para mi, me costó muchísimo acostumbrarme a ese nuevo estilo de vida, mi familia tuvo que apoyarme mucho. El hecho de cambiar el ritmo de vida fue complicado, y me costaba cortar el ritmo del baile, llegaba a mi casa después de tocar y no podía relajarme, quedaba acelerado. Sufrí de insomnio mucho tiempo, me costo cerca de un año y medio poder aclimatarme a esa nueva vida, porque gracias a Dios desde un comienzo fue algo increíble, el apoyo de la gente era algo que yo no podía creer. Cada vez que salía de mi casa tenia un montón de gente esperándome
MANOLO CÁNOVAS PRESENTA A CRISTIAN
Mi familia también sufrió mucho todo eso, lo que hizo que mi papa fuera a hablar con Manolo para explicarle lo que pasaba y que estaban muy preocupados por mi. Manolo habló conmigo y me aconsejo mucho, sobre todo me dio mucho aliento, me dijo que tenía mucha fe en mi y que me tranquilizara. Después de eso justo grabamos Aventurera y fue un boom.
En ese momento se hacían estadísticas de la demanda de discos que pedían las disquerías, y antes que el disco saliera, las disquerías ya pedían 42.000 placas, teniendo en cuenta que un disco de oro eran 60.000 placas. Apenas salio “de Trula lo mejor” llegó a disco de oro. Y en el año 2001, en la noche de presentación de Máxima Energía, festejamos el millón de discos vendidos.
Algo que tampoco voy a olvidar fue el día que Trula hizo el segundo reencuentro con Gary. Esa noche grabábamos el Exageradísimo 97, yo estaba muerto de miedo, y Gary que estaba en su vestuario me mando a llamar. Estuve conversando con él y me dio muchísimo aliento, me dijo que me tranquilizara, que todo iba a estar bien. Sus palabras me sirvieron para poder animarme a dar todo de mi. Esa noche salí a cantar y fue inolvidable, recuerdo que la gente bailaba y cantaba mis temas, no lo podía creer.
Cuando ya quedamos solos sin Manolo arriba de Trulala, me sentí muy huérfano, artísticamente, porque me reflejé mucho en él mas allá de que él era muy reservado. Por eso creo que uno a veces ha tenido cosas acertadas y cosas desacertadas porque me sentí muy desprotegido, fue muy duro para todos y para mi fue una intranquilidad que nunca pude superar. Nadie puede cuidarte mas que él porque él era Trulala, él te daba seguridad, él me enseño todo, todavía me sigo acordando de cosas que viví con él. Y en Trula se había dejado todo tal como lo había previsto Manolo pero no coincidíamos porque al no tener un jefe había muchas opiniones.
En el año 2002, Gustavo Castellaro se retira y yo me quedé en la banda, estuve un tiempo hasta que decidí irme porque me sentía solo, él era mi mejor amigo en Trula, mas allá de que la gente siempre me brindo mucho cariño. Me di cuenta que era un hijo de Trula y que era el momento de retirarme. Les hablé a los dueños y les dije que me iba.
Mi último baile fue el 28 de septiembre en La Vieja Usina, esa noche me bajé del escenario y fue muy triste para mí, encima la Usina estaba colmada, fue algo muy duro.
La idea de seguir en la música luego de mi partida de Trula surgió la misma noche de mi despedida. Al finalizar el baile me llamo Castellaro, que había estado escuchando el baile por la radio, para que nos juntáramos a hablar. Los dos queríamos seguir en esto, porque era lo que amábamos, así fue que decidimos formar una banda y el nombre de La Fiesta nace porque él me dijo que yo ponía la fiesta en Trulala, así como me enseñó Manolo y que le parecía que el mejor nombre era ese. Mas allá de que sea un nombre muy popular o muy común.
Los comienzos fueron muy duros, tardamos cerca de 40 días en acomodar todo, y salimos como pudimos, sin fechas, sin nada, con muchos nervios de pensar si le iba a gustar o no a la gente, no teníamos ninguna contratación. La única persona que confíó en nosotros fue el dueño del Abuelo Luis, que es un boliche de Río Segundo donde hicimos nuestro segundo baile.
Nos costó mucho armar la banda, llamábamos músicos profesionales y ninguno aceptaba, recién la ultima semana y media pudimos formar toda la banda y después Emeterio Farias nos dió la oportunidad de debutar en Atenas.
El debut fue un viernes 25 de octubre del 2002, fue una noche inolvidable, vivimos un estrellato los tres primeros años, batimos un gran record histórico en el cuarteto, fue arrollador.
EL PRIMER TEMA EN LA FIESTA
Luego de dos años decidí no ser mas dueño de la banda, porque para mi no era vida, era mucha responsabilidad, tenía que estar pendiente de muchas cosas y no podía cantar tranquilo, por eso decidí estar con mi familia en paz.
Después vivimos toda clase de momentos, buenos y malos pero hay algo que quiero rescatar y es que no todo lo que se dice de La Fiesta es verdad, porque siempre hay otras campanas, en la vida hay que escuchar dos campanas, y el que este libre de pecado que tire la primera piedra.
El momento actual que estoy viviendo es algo impresionante, comencé cantando a capella en Carlos Paz, fue espectacular y los chicos de la orquesta me pidieron que lo hiciera de nuevo, lo repetí en un Deportivo donde había 700 personas.
Finalmente debuté como solista el jueves 21 de junio del 2007 en Etruria y el sábado 23 se hizo la presentación oficial en el Deportivo. A pesar de todo lo que se dijo es algo que surgió sin ser planeado. Porque desde el comienzo de La Fiesta me pedían que fuera solista y nunca quise, siempre quise ser parte de una banda.
Aquellos que quieren a esta banda, que pagan la entrada y que nos siguieron en los momentos malos sobre todo, saben cual fue la verdad, saben lo que pasó ypor qué estoy cantando solo. Porque es algo que jamás lo quise, pero tuvimos cuatro meses de crisis muy grande y llegamos a llevar casi 20 personas un sábado en Lofts, lo cual fue muy triste. Entonces los dueños de esta época, me preguntaron si yo quería cantar solo porque ellos veían esa meta, yo les contesté que amo la fiesta y que mas allá de que no sea dueño la voy a pelear y si muero artísticamente moriré de pie.
Así sucedieron las cosas y obviamente recibí todas las criticas, los primeros meses decían que no iba a aguantar pero gracias a Dios, de a poquito estamos ganando terreno y creo que el objetivo se ha cumplido porque somos una banda respetada. Sobre todo porque estamos cuidando un estilo que no se usaba mucho, creamos una nueva alternativa que son los retros, creo que se estaba perdiendo el cuarteto, y nosotros recobramos eso.
También apareció el apodo del Loco, porque aunque haya 20 personas o haya 8000 o 9000 lo disfruto, sé como disfrutarlo y principalmente no me siento huérfano de nada porque somos un equipo de trabajo. Además creo que el que va al baile de La Fiesta lo pasa bien, por lo menos eso me hacen sentir.
Aprovecho este espacio para agradecerles a todos ustedes por el momento que estoy viviendo. Gracias por el apoyo que me brindan desde un principio y por permitirme ser parte de la historia del cuarteto.
Acerca de esta página
Buscar en Google
La Musica Que Vos Queres Escuchar!
Las 24 Horas Online. en CatamarcaFlogs.